Absolutamente. El corcho expandido es una excelente opción para fachadas: aísla la casa y, al mismo tiempo, es ligero, natural, atractivo y resistente a la humedad y al moho. En verano ayuda a mantener el interior agradablemente fresco, y en invierno conserva el calor. También es resistente a los insectos, las termitas y los roedores. En caso de incendio, no se derrite, ralentiza la propagación de las llamas y no libera gases tóxicos.
Por el contrario, los revestimientos tradicionales suelen agrietarse, son más susceptibles a la humedad, las algas y las eflorescencias, y no ofrecen el mismo nivel de aislamiento que el corcho expandido.