Un cuchillo para corcho es la herramienta ideal – solo asegúrate de que esté bien afilado. Una hoja sin filo puede desgarrar el material en lugar de cortarlo limpiamente.
Para obtener los mejores resultados, corta la cinta de corcho sobre una superficie dura y plana. Evita las bases de corte blandas, ya que pueden producir bordes irregulares.